Una jornada crucial

Génova 13 o el partido del pánico

Hoy sábado, Mariano Rajoy afronta el día más difícil de su carrera política. El presidente del Gobierno y del PP ha anunciado una solemne aparición pública en la que explicará los supuestos sobresueldos y presuntos pagos en dinero negro denunciados por su ex tesorero Bárcenas, pillado en Suiza con una cuenta de 22 millones de euros. Por cierto, astutamente legalizados gracias a la amnistía fiscal de Montoro. La clásica pachorra marianil y su abulia ante cualquier problema feo se han vuelto como un bumerán contra el PP, que ha perdido dos semanas clave para hacer frente a las revelaciones de algunos medios y a las acusaciones de la oposición, encabezada, sí, sí, por el PSOE. Aunque las Obras Escogidas de Bárcenas editadas por Prisol no sean argumento fiable ante un juez, las sumas de dinero reseñadas en ellas afectan personalmente a Rajoy y a otros dirigentes, aunque no todos y no tantos; y en el partido compiten el pánico y la indignación. En las baronías se escuchaba ayer: «esto se nos va de las manos». Y que a más de uno y de veintiuno se le fue la mano parece claro. A ver cómo lo explica Rajoy.

Decisiones de Torres-Dulce

¿'Fiscalópoli' en 'Tangentópoli'?

En dos días, la Fiscalía General del Estado ha asumido públicamente la necesidad de investigar tres casos empantanados o sin definir pese a su enorme importancia, no en balde afectan a la Jefatura del Estado, al partido del Gobierno y al que encabeza la secesión -y corrupción- de Cataluña. Torres-Dulce ha pedido que declare Bárcenas por los sobresueldos del PP -evitando mezclarlo con el caso Gurtel como quería Ruz, sustituto de Garzón-, pero abriendo la puerta a revelaciones muy perjudiciales para el PP. También ha admitido que está a punto de ser imputado por corrupción Oriol Pujol, secretario general de Convergencia, el partido de Mas.

Y como remate ha anunciado que, según lo que diga Diego Torres, socio de Urdangarin, pedirán o no la imputación de su otra socia, la Infanta Cristina. La situación recuerda a la de Italia cuando jueces de izquierda fueron contra la Tangentópoli (corrupción) metieron en la cárcel a un tercio del Parlamento y hundieron la República. Ojo, que aquí Di Pietro se llama Bermejo.

Vuelve el 'comando Rubalcaba

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El PRISOE acaricia un incruento 13-M

Entre otros efectos, el caso Bárcenas ha tenido la dudosa virtud de resucitar a un cadáver político: el PSOE. Viendo al renacido comando Rubalcaba desplegándose en todos los medios de prensa y audiovisuales controlados por la izquierda (gracias al PP) y con el imperio prisaico al frente (gracias al PP), uno cree estar viendo la reedición no sangrienta pero igualmente devastadora de las jornadas del agit-prop del 11-M al 13-M. Prisa, de momento sin tres capas de calzoncillos, capitanea la operación. Y publica las cosas de Bárcenas o inventa escandalosas mentiras, confiando en que la batahola mediatica de la progrez hará inútil la reacción. Un ejemplo que me concierne: El País publicó que Libertad Digital -y se sugería que yo mismo- habíamos recibido dos pagos del PP de 36.000 euros.

Pero al día siguiente el diario dice que es un tal Alberto Dorrego, que ni conozco, ni soy yo, ni es de LD, el beneficiario de la lotería de Bárcenas. Si hay justicia, pagarán su fechoría. Pero ¿de qué sirvieron las autopsias del 13-M que demostraron que no había terroristas islámicos? De nada. El PRISOE ya había ganado.

Cuatro imputados por Nóos

Éramos pocos y abdicó la reina

También es casualidad que en plena mascletá del caso Nóos, con casi toda la cúpula de la asociación sinónimo de lucro imputada ya por el juez, la reina Beatriz de Holanda abdique en el Príncipe Guillermo que, con la reina Máxima, nacida Zorreguieta, subirá al trono en julio. Y sobre casualidad, calamidad que la reina tenga 75 años, como Juan Carlos I, y Guillermo, 45, los que cumplió este miércoles el Príncipe de Asturias. La parálisis, hija del pánico, en la Zarzuela es tal que ni se han atrevido a apartar del cargo al último imputado, Carlos García Revenga, secretario de las Infantas Elena y Cristina y tesorero de Nóos.

La explicación está en su frase del pasado sábado en LOC: «Ni la Infanta ni yo teníamos responsabilidad en Nóos». De los cinco miembros de la directiva de Nóos ya están imputados cuatro: Urdangarin, su socio Torres, la mujer de Torres y el secretario de la mujer de Urdangarin, nacida Cristina de Borbón. El juez, lector de Blas de Otero, medita releyendo aquel poema musicado por Paco Ibáñez: «Te llamarán / nos llamarán a todos…».